Señor:
Hoy quiero hablar contigo, quiero pedirte algo que nunca te he pedido yo sé que te he buscado por más de mil motivos, pero es que ésto es distinto, pues tiene otro sentido.
No pido para mí, que todo lo he tenido desde el instante aquel en que te he conocido, te ruego simplemente que cuides a mi amigo, que abras su corazón, que pueda hablar contigo, que te sienta presente, cercano y siempre vivo, que aprenda a valorarte con todos los sentidos, que se aferre a tu mano y siga los caminos que Tú le has preparado desde el comienzo mismo, y también le trasmitas los sentimientos míos, que sepa que por siempre podrá contar conmigo, y unidos por tu gracia, ambos estar contigo.
Amén.
Gladys.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario